Segue a transcrição de matéria de autoria de
Sandro Magister, renovado jornalista italiano, especializado em temas
religiosos (link abaixo). Assinalado em negrito alguns trechos que me pareceram
mais significativos. (Tradução em espanhol de Helena Faccia Serrano, Alcalá de Henares, Espanha).
Lutero a la hoguera. No, a los altares.
La doble visión del Papa jesuita
Ayer
veía en la Reforma protestante la raíz de todos los males. Hoy la celebra como “medicina
para la Iglesia”. Pero no resulta que haya renegado de sus críticas. Helas aquí,
una palabra tras otra
Sandro Magister
Roma, 27 DE OCTUBRE DE 2016 — Dentro de cuatro días Francisco volará a Lund, acogido por la obispo luterana de Suecia, para celebrar junto con
la Federación luterana mundial los quinientos años de la Reforma protestante. Ningún
Papa, antes de él, ha manifestado tan calurosa simpatía por Lutero.
Interpelado
sobre el gran herético en la conferencia de prensa en el vuelo de vuelta de Armenia, Francisco
ha dicho que Lutero estuvo animado por las mejores intenciones y que su reforma
fue “una medicina para la Iglesia”, sobrevolando por encima de las
divergencias dogmáticas esenciales que desde hace cinco siglos enfrentan a
protestantes y católicos, porque —son siempre sus palabras, esta vez
pronunciadas en el templo luterano de Roma— “la vida es más grande que las
explicaciones y las interpretaciones”.
El ecumenismo de Francisco está hecho de este modo.
El primado está en los gestos, en los abrazos, en
algún acto caritativo hecho juntos. Los
conflictos doctrinales, aunque abismales, los deja para las discusiones de los
teólogos, a quienes de buena gana confinaría “en una isla desierta”, como
le gusta decir, aunque demasiado en broma.
* * *
Sin embargo, también Jorge Mario Bergoglio se ha
hecho una idea personal sobre qué han sido Lutero, Calvino y el protestantismo
en general. Una idea que hoy ha encerrado bien dentro
de sí, pero que en el pasado, cuando
no era Papa ni obispo, no ha tenido
miedo en exponer claramente.
Era el verano de 1985
cuando el entonces simple jesuita Bergoglio tuvo en Argentina, en Mendoza, una conferencia dedicada precisamente a
la infatigable batalla de hace cinco siglos entre la Compañía de Jesús y los
protestantes. Reproducimos más adelante los pasajes en los cuales arremetió con furia demoledora contra el
pensamiento y la obra de Lutero y Calvino.
Treinta
años después no se evoca nada de aquella
invectiva en las palabras y en los gestos tan amigables que Bergoglio,
convertido en Papa, dirige a los protestantes. Pero de ello no se deduce
necesariamente que haya renegado, dentro de sí, aquellas críticas radicales
suyas.
De
hecho se han vuelto a publicar tal cual, en español y en italiano, en dos
libros que ha autorizado de hecho, salidos después de su elección como Papa:
> J. M. Bergoglio — Francisco, Reflexiones
espirituales sobre la vida apostólica, Grupo de Comunicación Loyola,
Bilbao, 2013. > J. M. Bergoglio — Francesco, Chi
sono i gesuiti. Storia della Compagnia di Gesù, EMI, Bologna, 2014
La
edición española del libro ha sido preparada por el Grupo de Comunicación Loyola,
expresión oficial de la Compañía de Jesús. Y la edición italiana cuenta,
además, con el prólogo del padre Antonio Spadaro, director de La Civiltà Cattolica, el jesuita más
cercano que ningún otro al Papa Francisco, su consejero, confidente y escritor fantasma.
El cual, al resumir la requisitoria anti protestante de Bergoglio, no solamente
no toma la mínima distancia de ella, sino que incluso la presenta como “un
riquísimo fresco por el cual se puede fácilmente comprender el modo de proceder
del Papa, fundamentado sobre dos pilares: la realidad y el discernimiento”.
Cuando
salió la edición italiana del libro, a mediados de 2014, el eminente teólogo
protestante Paolo Ricca, valdense, expresó su desolado estupor en un editorial
en la revista Riforma:
“Me pregunto
cómo es posible tener todavía hoy, o incluso hace treinta años, una visión tan
deformada, torcida, desfigurada y sustancialmente falsa de la Reforma
protestante. Es una visión con la cual no solamente no se puede iniciar un
diálogo, ni siquiera una polémica: no vale la pena, porque es demasiado
distante y deforme de la realidad. Una cosa es segura: a partir de una visión
así, una celebración ecuménica del quingentésimo aniversario de la Reforma, en
2017, parece literalmente imposible”.
Y, sin
embargo, el Papa Francisco lo ha conseguido. Su viaje festivo a la Suecia
luterana es la prueba de ello. “Audacia de lo imposible” es también la consigna
del nuevo general de los jesuitas, elegido hace pocos días. Para cumplir el
milagro, a Bergoglio le ha bastado simular el olvido total de aquél discurso
suyo de hace treinta años en Mendoza.
Aquí
está. Que hay que releer por entero, a la vigilia de la fiesta de Lund.
Gravura representando o "casamento" do ex-frade Lutero com a ex-freira Catarina von Bora |
Lutero: una ‘idea loca’ que ha evolucionado en herejía y cisma
por Jorge Mario Bergoglio
Muchas
veces, San Ignacio ha sido definido como el bastión de la Contrarreforma. Esto
es verdad; sin embargo […] los jesuitas estaban más preocupados con Calvino que
con Lutero. […] Habían descubierto con perspicacia que ahí se escondía el
verdadero peligro para la Iglesia.
Calvino
ha sido el gran pensador de la Reforma protestante, quien la ha organizado y
conducido en el plano de la cultura, de la sociedad de la Iglesia; ha plasmado
una organización que Lutero no se había propuesto. Éste, el alemán impetuoso
que probablemente había proyectado al máximo dar vida a una Iglesia nacional,
es releído y reorganizado por aquél francés frío, un genio latino versado en
jurisprudencia, que era Calvino.
Lutero
era visto como un hereje. Calvino, además, como un cismático. Me explico. La
herejía —por usar la definición de Chesterton— es una idea buena que ha
enloquecido. Cuando la Iglesia no puede curar su locura, entonces se transforma
en un cisma. El cisma implica ruptura, división, separación, consolidación
independiente; va creciendo por pasos sucesivos hasta conquistar una propia
autonomía. San Ignacio y sus sucesores combatirán contra la herejía cismática.
Y,
¿cuál es el cisma calvinista que provocará la lucha de Ignacio y de los
primeros jesuitas? Se trata de un cisma que afecta tres áreas: el hombre, la
sociedad y la Iglesia. […]
* * *
En el
hombre, el calvinismo provocará el cisma entre razón y emoción. Separa la razón
del corazón. En el plano emotivo, el hombre de aquél siglo, y bajo la
influencia luterana, vivía la angustia por la propia salvación. Y, según
Calvino, de esa angustia no había que preocuparse. Contaba solamente
preocuparse de las cuestiones de la inteligencia y de la voluntad.
Este
es el origen de la miseria calvinista: una disciplina rígida con una gran desconfianza
a lo que es vital, cuyo fundamento es la fe en la total corrupción de la
naturaleza humana, que puede ser ordenada solamente por la superestructura de
la acción del hombre. Calvino cumple un cisma dentro del hombre: entre la razón
y el corazón.
Más
aún, Calvino provoca otro cisma en la razón misma: entre el conocimiento
positivo y el conocimiento especulativo. Se trata del cientificismo que rompe
la unidad metafísica y provoca un cisma en el proceso intelectivo del hombre.
Todo objeto científico se asume como absoluto. La ciencia más segura es la
geometría. Los teoremas geométricos serán una guía segura de referencia del
pensamiento. Este cisma, que se da en la misma razón humana, afecta a toda la
tradición especulativa de la Iglesia y a toda la tradición humanística. […]
* * *
El
cisma calvinista afecta también a la sociedad, que resultará dividida. Como
portadoras de salvación Calvino privilegia las clases burguesas. […] Esto
implica y comporta un revolucionario menosprecio de los pueblos. Ya no hay ni
pueblo ni nación, y, al contrario, se configura una internacional de la
burguesía.
Con un
anacronismo podríamos aplicar aquí la fórmula de Marx: “Burgueses de todo el
mundo, uníos”, despreciando cualquier significado de la nobleza de los pueblos.
Con esta actitud Calvino es el verdadero padre del liberalismo, que ha sido un
golpe político al corazón de los pueblos, a su modo de ser y de expresarse, a
su cultura, a su manera de ser cívica, política, artística y religiosa.
Probablemente
en el plano social esto es más evidente en la elaboración, primero de Hobbes
(según el cual los hombres debían convivir por medio del engaño y de la fuerza,
mientras que el Estado, “moderno Leviatán”, existía sencillamente para tener a
raya los egoísmos y evitar la anarquía, legitimando una lógica de dominio, dado
que ya no había ninguna ley natural), y después de Locke, mucho más
sofisticado, pero no menos cruel.
Hobbes
reivindica el “poder” sin corazón, con una justificación absolutista y
racionalista. Locke reviste todo esto con una “compostura civil” y busca
redefinir la sociedad excluyendo al pueblo.
La
postura de Locke es la siguiente: parte de la admisión de un cierto derecho
natural y se sirve del slogan “la razón enseña que…”, para después deducir —como
por magia— conclusiones que justifican ese cisma social: el hombre —puesto que
supera la propia corrupción natural por medio del activismo— puede poseer el
fruto de su trabajo siempre que ese fruto no sea corruptible. He aquí que nace
la moneda y la índole monetarista del liberalismo.
Además,
la razón enseña que el hombre tiene derecho a comprar trabajo. Y con esto se
dan dos tipos de trabajadores: los que poseen bienes no corruptibles y los que
no los poseen. El Estado tiene la función de mantener el orden entre estas dos
categorías de trabajadores evitando la rebelión de estos contra los primeros.
En el fondo, el pensamiento calvinista-cismático-liberal está reivindicando
para el segundo grupo de trabajadores el poder de rebelión, lo que hoy
llamaríamos la rebelión del proletariado. En última instancia, el marxismo es
el hijo obligado del liberalismo.
* * *
En
tercer lugar, el cisma calvinista hiere a la Iglesia. […] Sustituye la
universalidad del pueblo de Dios con el internacionalismo de la burguesía. […]
Decapita el pueblo de Dios de la unidad con el Padre. Decapita todas las
cofradías de los oficios privándolas de los santos. Y, suprimiendo la misa,
priva al pueblo de Dios de la mediación en Cristo realmente presente. […]
En el
fondo Calvino había intentado salvar al hombre, al que la perspectiva luterana
había precipitado en la angustia. En Lutero se manifiesta la intención de
salvar al hombre del paganismo del renacimiento, pero esa intención había
evolucionado hacia una “idea loca”, es decir, en herejía. Por eso Calvino, con
la frialdad legislativa que le caracteriza, parte del angustioso planteamiento
luterano y evoluciona así: el hombre está corrompido; por consiguiente,
disciplina.
De
aquí nace lo que conocemos como el “rigor protestante”. Éste propone signos de
salvación diferentes de aquellos católicos —los que hemos citado antes—, y el
signo es el trabajo acumulativo. Casi como si pretendiera identificar los
frutos del trabajo con los signos de la salvación. Podríamos simplificarlo de
manera caricatural con este axioma: “Serás salvado si adquieres la riqueza que
se obtiene con el trabajo”. Y he aquí plasmada la clase burguesa.
* * *
A
partir del planteamiento luterano, si somos coherentes, quedan solamente dos
posibilidades entre las cuales optar en el curso de la historia: o el hombre se
disuelve en su angustia y ya no es nada (y es la consecuencia del
existencialismo ateo), o bien el hombre, basándose en esa misma angustia y
corrupción, da un salto en el vacío y se autodefine superhombre (es la opción
de Nietzsche).
En el
fondo Nietzsche regenera a Hobbes, en el sentido de que la “última ratio” del
hombre es el poder. El dominio es posible solamente contra el amor, a partir de
la contraposición, en el hombre, entre la razón y el corazón. Un tal poder,
como “última ratio”, implica la muerte de Dios. Se trata de un paganismo que,
en los casos del nazismo y del marxismo, adquirirá formas organizadas en
sistemas políticos.
La
perspectiva luterana, porque se fundamenta en el divorcio mismo entre la fe y
la religión (efectivamente, concibe la fe como la única salvación, y acusa a la
religión —los actos de religión, la piedad, etc.— de ser una mera manipulación
de Dios), genera divorcio y cisma; comporta toda clase de individualismos que,
en el plano social, afirman su hegemonía.
Toda
hegemonía, tanto religiosa, política, social o espiritual, encuentra aquí su
origen.
____________
Nota de Sandro Magister: En 1985, cuando pronunció esta conferencia,
Jorge Mario Bergoglio tenía 49 años y era rector del Colegio Máximo de San
Miguel. De 1973 a 1979 había sido provincial de la Compañía de Jesús en
Argentina.
Un ejemplo de este nuevo enfoque se refiere a la comunión eucarística.
Entre las críticas radicales que Bergoglio dirige al protestantismo reformado
en su conferencia de 1985 estaba la de “suprimir la misa” y, por consiguiente,
de “privar al pueblo de Dios de la mediación en Cristo realmente presente”.
De lo que se deduce la incompatibilidad entre las dos visiones de la
eucaristía.
Pero en la práctica, hoy el Papa Francisco se muestra más que dispuesto
a cancelar la prohibición de hacer la comunión juntos entre católicos y
protestantes, como ha dejado entender en respuesta a la pregunta de una
luterana casada con un católico, el pasado 15 de noviembre, mientras visitaba
la iglesia de los luteranos de Roma.
Traducción en español de Helena Faccia Serrano, Alcalá de Henares,
España.
2 comentários:
BERGOGLIO, O PARADOXAL. BERGOGLIO, O HEREGE-MOR.
NO TEMPO DO PAPA BENTO XVI OS PROGRESSISTAS - OU ESQUERDISTAS/HETERODOXOS/INFILTRADOS DA MAÇONARIA ET ALII - ESTAVAM CONFINADOS NOS SEUS TÚMULOS...
A lista de supostos cardeais maçons de Mino Peccoreli estaria hoje em dia bem aumentada, né Hans Küng & Ass?
O papa Bento XVI não homenagearia o heresiarca Lutero e seu relativista protestantismo!
..“No entanto, o papa decepcionou as expectativas”, (Erfurt, 2011), afirma o jornal de Munique, acrescentando julgamentos muito severos: “Ele não deu nenhum sinal de aproximação entre as confissões, não mostrou nenhuma perspectiva para uma celebração comum do 500º aniversário da Reforma, em 2017. Ele não viajou para a sua pátria com presentes de hóspede, e a religião não pode ser objeto de negociações. Quando se trata de fé, esse papa descarta qualquer compromisso”.
http://blog.comshalom.org/carmadelio/26550-papa-bento-xvi-nao-reabilitou-lutero-afirma-porta-voz-do-vaticano.
Ele não prestigiava oficialmente nenhum dos Congar, Schoenborn & Carlo Martini das esquinas!
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